Me encanta hacerle tarta a Jorge!!! El año pasado fue un cerebro de crema y un cementerio. Como siempre, Silvia, su mujer, me dio carta blanca y sé lo frikie y gore que es...jejeje.
Tenía el libro de Lily Vanilli ("¡Un zombi se comió mi cupcake!") y me moría de ganas por hacer el corazón que aparece en uno de los capítulos.
Lo primero que me dijeron todas es que daba mucho asco la presentación. En vez de mosquearme, me alegré, ya que esa era la idea que quería transmitir en cuanto a la presentación. ¡Incluso a él le dió reparo llevársela a sus suegros! jajajaja.
Ya había hecho una tarta selva negra el año pasado, pero como todo es evolucionar, encontré una receta en el libro "Pasteles, pastas, galletas, merengues, tartas, panes dulces y salados" de Caroline Bretherton (será por libros!!!!), donde el bizcocho no sólo quedó más tierno, sino con más volumen.
La elaboración es un poco más laboriosa, pero intentaré explicarla lo mejor posible.
Ingredientes para el bizcocho de chocolate:
-85grs. de mantequilla derretida.
-6 huevos.
-175grs. de azúcar.
-125grs. de harina.
-50gr. de cacao en polvo tipo Valor.
-1 cucharadita de esencia de vainilla.
Preparación del bizcocho de chocolate:
Colocar los huevos y el azúcar en un bol de cristal refractario. Colocarlo sobre una cazarola con agua (que no toque el cuenco o se cuajarán los huevos) y calentar a fuego medio bajo, mientras con una batidora, montamos los huevos. Cuado empiecen a mancharse los bordes y aclare (me llevó unos 3 minutos aproximadamente), apartas el bol del fuego y sigues batiendo, unos 5 minutos más, hasta que empiece a enfriarse. (Esto es a lo que me refería con laborioso)
Tamizar el cacao y la harina e ir incorporando a los huevos con mucho cuidado, para que no baje y con movimiento envolvente. Debo decir que tardó en incorporarse un poco y que hay que tener mucho cuidado, porque siempre quedan restos de harina en el fondo. Así que recomiendo una espátula de silicona y girar el bol al mismo tiempor que se trabaja con la espátula.
Incorporar la mantequilla y la esencia de vainilla.
Prepalentar el horno a 180º y preparar un molde de 23cm.
Tarda unos 40 minutos en hacerse, aunque siempre es bueno pincharlo con un palillo largo para ver si está hecho.
El bizcocho, como siempre, debe de prepararse de un día para otro.
Ingredientes para el relleno:
-1 bote de cerezas (unos 450grs.)
-Medio bote de mermelada de cerezas (no es necesario, pero aumenta el sabor)
-Un chorrito de licor de cerezas Krirch (si no hay niños...En mi caso no le puse)
-2 latas de nata Ermol (o unos 600ml. de nata normal)
Preparación del relleno:
Escurrir las cerezas y reservar el almíbar con el que se conservan.
Cortar el bizcocho en tres capas y mojar cada una con el almíbar de cerezas. Se podría calentar y añadirle azúcar, pero tampoco queremos un pastel demasiado dulce. Así que con un pincel, mojamos mucho los bizcochos.
Se extiende la cobertura y se alisa, hasta que quede una tarta blanca por fuera
Si se quiere, sólo falta decorarla con chocolate, pero esta vez, el corazón mandaba...jejeje.
Para el corazón hice un bizcocho básico (picha aquí) en un molde pequeño y le añadí colorante rojo para darle más efecto.
Después de cortarlo y modelarlo, utilicé un fondant rojo, mezclado con un poco de colorante negro. Sin mezclarlo demasiado, debían de quedar ciertas vetas negras que hiciesen las veces de venas.
Para pegarlo al bizcocho, utilicé la mermelada de cerezas.
Para la sangre, no me compliqué la vida.
Compré un bote de sirope de fresa. Añadí unas cucharadas de colorante rojo y un poco de colorante azúl, para que se oscureciera y adquiriera ese color de la sangre.
Pinchar el corazón con el sirope tintado y extender sobre parte de la tarta, para que tome ese aspecto siniestro que buscaba.
Espero que les guste!!!
